La betaína interviene en varios procesos fisiológicos, pero se utiliza principalmente para metilar un aminoácido llamado homocisteína. Al donar uno de sus tres grupos metilo, la betaína puede convertir la homocisteína en metionina, que es un componente clave para la síntesis de creatina.
 
La creatina es un compuesto orgánico esencial para el rendimiento del ejercicio porque ayuda a regenerar el trifosfato de adenosina (ATP), la moneda energética del cuerpo. Al aumentar los niveles corporales de creatina, la betaína puede incrementar la fuerza, la potencia y el tamaño de los músculos.
 
Aumentar la fuerza, la potencia y la resistencia.
Mejorar el crecimiento y la recuperación muscular.
Promover la pérdida de grasa.
Favorece la salud cardiovascular y hepática.
 
Es importante tener en cuenta que algunos pre-entrenamientos ya contienen betaína. Así que si tu pre-entrenamiento ya contiene 2,5 gramos, no necesitas añadir más ese día.